Castillo de Orihuela
Su origen se remonta al siglo IX y estaba construida en siete siete círculos.
El castillo de Orihuela se extiende por la cima y la vertiente sur del monte de San Miguel y su origen se remonta al siglo IX. La parte superior estaba ocupada por la alcazaba musulmana, de la que se han conservado el aljibe, restos de dependencias y algunos tramos de murallas.
En la época de Taifas, siglo XI, se construyó la muralla de tapial que desciende desde la parte alta hacia la ciudad y, en la almorávide, en el siglo XIII, los tres torreones de la parte anterior a la alcazaba.
La fortaleza, que estaba construida en siete círculos, tuvo varias modificaciones tras la reconquista cristiana, perceptibles en los torreones bajos cercanos al seminario.
El castillo sufrió serios desperfectos durante la Guerra de Sucesión y acabó finalmente destruido en el terremoto de 1829.