La construcción de un castillo
Tarea costosa sólo al alcance de los señores ricos, los nobles y los reyes.
La construcción de un castillo era una tarea muy costosa que únicamente podían afrontar los señores ricos, los nobles y los reyes. Para iniciar la edificación era necesario un permiso real llamado "Permiso para almenar" que concedía el monarca.
El castillo tenía que estar diseñado para las épocas de guerra y los periodos de paz. Esto significaba que debía de abastecerse de comida y otras provisiones con facilidad. El agua era un bien básico y era imprescindible poseer fuente o pozo propios resguardados de un posible asedio.
La parte más débil de un castillo eran sus puertas de acceso. No es de extrañar que sus ocupantes ideasen todo tipo de métodos de defensa para fortalecerlas frente a un ataque.
La primera medida era la de flanquearla con torres que la protegían y hacían más difícil la aproximación a la entrada. Las puertas se cerraban mediante el sistema de bisagras y se atrancaban con sólidas maderas. Sin embargo, el uso del rastrillo, de los puentes levadizos y de los fosos ayudaban a mejorar la defensa de las zonas de acceso a la población o a la fortaleza.
Las técnicas de construcción de los castillos valencianos tenían tres modalidades:
- Sillería: cuando se usaba piedra de cantera bien trabajada en bloques de distintos tamaños. Este sistema fue poco habitual en el Reino de Valencia. Los pocos ejemplos los tenemos en algunos castillos templarios: Peñíscola, Xivert, Miravet, y en alguno de Alicante (Alicante y La Mola, en Novelda). La sillería si que es muy utilizada para puertas y ventanas.
- Mampostería: uso de morteros de cal, piedras y arena, usados para la construcción de muros. La mezcla con piedras mas voluminosas se usaban para las partes bajas, mientras que el uso de piedras pequeñas y de grava se utilizaba para las partes altas y para relleno de superficies.
- Tapial: es el sistema más extendido en tierras valencianas, usado en las construcciones musulmanas. Esta técnica constructiva consiste en el uso de encofrados de diversa anchura rellenos de todo tipo de materiales mezclados con cal que de por sí no son resistentes pero que mezclados y sometidos a secado y presión adquieren gran dureza. Cada encofrado tenía, aproximadamente unos 90 cms de altura. Las sucesivas superposiciones obtenían la altura deseada.